El 22 de junio, se dará inicio al juicio oral por Los violentos incidentes en la región boscosa atlántica de Marina Kué, donde perdieron la vida seis policías y 11 campesinos; el proceso ha estado atravesado por irregularidades en contra de 13 campesinos que habían ocupado un terreno supuestamente fiscal, pero que resultó de propiedad privada con fines conservacionistas de la empresa Campos Morombi, del Grupo Riquelme. En medio de una campaña de observación al proceso, el lugar sigue siendo objeto de control policial presuntamente por la presencia de campesinos pobres que desarrollarían allí cultivos de marihuana y narcotráfico. En 2014, la empresa dijo que buscará dejar la reserva natural para el Estado, aunque el mismo año de la masacre anunciaba que dedicaría Campos Morombi a un ingenio azucarero.