[Reporte original en inglés. La siguiente es una traducción del pasaje que se refiere a Flores de la Montaña (pg. 11) preparada por el Centro de Recursos sobre Empresas y Derechos Humanos]. En junio de 2005, trabajadores de Flores de la Montaña en Cayambe intentaron organizar un sindicato. Tres días después que los trabajadores notificaran al Inspector de Trabajo de la creación del sindicato, la gerencia despidió a todos los 35 trabajadores que habían firmado el documento para formar el sindicato. Dos semanas más tarde, los trabajadores despedidos protestaron en la entrada de Flores de la Montaña para defender su derecho a la libertad de asociación. En agosto de 2005, en Ministerio del Trabajo reconoció legalmente al sindicato pero la empresa rehusó tanto respetar la decisión como pagar la compensación adicional establecida por la ley para trabajadores sindicalizados que son despedidos ilegalmente. En lugar de ello, representantes de la empresa visitaron individualmente a los trabajadores despedidos y los presionaron para que aceptaran la compensación y terminaran su apoyo al sindicato. Eventualmente, todos los trabajadores fueron presionados a aceptar la compensación ofrecida por la empresa, lo que en efecto destruyó los esfuerzos del sindicato.