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Artículo

10 Mar 2022

Autor:
Corporación Regional para los Derechos Humanos - CREDOS

Crisis humanitaria y crímenes contra líderes-as- sociales y defensores-as- de derechos humanos en el Magdalena Medio

Crisis humanitaria y crímenes contra líderes-as- sociales y defensores-as- de derechos humanos en el Magdalena Medio - 24 de febrero de 2022.

La Corporación Regional para la Defensa de los Derechos Humanos – CREDHOS, en su labor por la defensa, promoción y protección de los Derechos Humanos, manifiesta su RECHAZO y PROFUNDO DOLOR ante los hechos violentos que atentan contra la vida y la dignidad humana de la población del Magdalena Medio colombiano, en especial, contra líderes y lideresas sociales cometidos recientemente. Como lo denunciamos previa y públicamente en los comunicados titulados “CRÍTICA SITUACIÓN DE VIOLACIÓN A LOSDERECHOS HUMANOS EN EL MAGDALENA MEDIO COLOMBIANO” del 23 de diciembre de 2021,y “EXPANSIÓN DE GRUPOS ARMADOS, GRAVES VIOLACIONES A LOS DDHH E INFRACCIONESAL DIH EN EL MAGDALENA MEDIO” del10 de febrero de 2022, existe un riesgo inminente contra la integridad física y mental de los líderes y lideresas sociales, así como graves violaciones a los Derechos Humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario enfrentadas a diario por comunidades del territorio… Dicha problemática se presenta en el marco de la expansión y reconfiguración de las dinámicas de los actores armados legales e ilegales – AGC, ELN y grupos post-FARC al mando de Gentil Duarte – , con el propósito de establecer el control sobre la población civil y las economías de la región. Además, la violación a los Derechos Humanos se profundiza tras el interés del Gobierno Nacional y determinados sectores económicos de expandir y aprobar actividades minero-energéticas en territorios con una importante riqueza ecológica y sociocultural. Es por ello que, ante la oposición de las comunidades y sus liderazgos sociales, se han presentado violaciones a los Derechos Humanos de defensores y defensoras del territorio; como ha ocurrido con el señalamiento, estigmatización, amenaza y desplazamiento forzado de líderes y lideresas ambientales que se han opuesto a la implementación de los proyectos pilotos de fracking en el municipio de Puerto Wilches, y con la persecución y asesinato de líderes campesinos que se han resistido al despojo de sus tierras ante el paramilitarismo y la economía extractivista

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