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Opinión

20 Oct 2023

Autor:
Feminists for a Binding Treaty

5 razones por las que el Tratado Vinculante debe ser feminista

Feminists for a Binding Treaty

Desde hace nueve años, cada mes de octubre, el Grupo de Trabajo Intergubernamental de la ONU sobre empresas transnacionales, los Estados y las organizaciones de la sociedad civil se reúnen en Ginebra para debatir una cuestión urgente: la necesidad de un tratado vinculante que aborde las violaciones de los derechos humanos por parte de las empresas en todo el mundo.

Dentro de unos días volverán a reunirse para negociar un texto que permita a les afectades por abusos empresariales reclamar sus derechos y obtener justicia. Antes de esta sesión, les presentamos aquí 5 razones por las que creemos que el proceso y el Instrumento Jurídicamente Vinculante deben ser feministas para ser eficaces:

  1. Las mujeres soportan la carga de múltiples crisis: La inseguridad alimentaria, el cambio climático y los abusos de las empresas afectan en mayor medida a las mujeres, a través de múltiples formas de discriminación. Por ejemplo, las mujeres rurales e indígenas están especialmente expuestas. Las mujeres también son más vulnerables al acoso sexual, la explotación, la trata y otros tipos de violencia.
  2. Las mujeres no están incluidas en la toma de decisiones: La toma de decisiones políticas tiene un impacto enorme sobre el sustento, la salud, las comunidades y el futuro de las mujeres. Especialmente en los países en desarrollo, las mujeres son las más vulnerables a los efectos de las políticas económicas neoliberales. Los estudios demuestran que la participación de las mujeres en la toma de decisiones produce mejores resultados para todos. Sin embargo, las voces, la participación y el liderazgo de las mujeres que se organizan colectivamente por sus derechos en las cadenas de suministro y de las defensoras de los derechos humanos son activamente reprimidos.
  3. Las mujeres trabajan más, pero cobran menos: Suelen ganar menos, tienen menos ahorros y soportan la carga del trabajo no remunerado de cuidados y del trabajo doméstico. Además, es más probable que trabajen en el sector informal debido a la necesidad de buscar un trabajo flexible que se adapte a sus responsabilidades de cuidado y a la falta de acceso a mejores empleos y oportunidades. Esta trampa de pobreza las deja expuestas a la violencia, la explotación, el trabajo forzoso y otras formas de esclavitud moderna. En el sector formal, las mujeres reciben salarios más bajos, menos ascensos y están sub-representadas en la toma de decisiones.
  4. La justicia de género es fundamental para la justicia climática: En medio de una crisis climática, las políticas que responsabilizan a las empresas por explotar el medio ambiente y contribuir al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero son necesarias desde hace mucho tiempo. Las mujeres y las niñas están en el centro de la justicia climática, también en su papel fundamental como defensoras del medio ambiente. También son clave para crear resiliencia climática. Además, la apropiación de los recursos naturales y el acaparamiento de tierras por parte de las corporaciones de la minería y las industrias extractivas golpean con mayor dureza a las mujeres.
  5. Las garantías reales de justicia son la necesidad del momento: Sabemos que las mujeres, las personas con diversidad de género y las comunidades marginadas pagan el precio más alto cuando las empresas violan los derechos humanos. Ya es hora de que se protejan los derechos de las personas que sufren vulnerabilidades múltiples, ya sean personas racializadas, comunidades indígenas o quienes viven en situaciones de conflicto. Los abusos empresariales afectan desproporcionadamente a varios grupos, entre ellos las personas LGBTQIA+ y las personas con discapacidad. Un marco sólido de derechos humanos se traducirá en normativas reales y aplicables y en recursos accesibles.

Puntos de vista desde una óptica feminista

¿Cómo podría un Tratado Vinculante feminista contribuir a la consecución de estos objetivos? Abogamos por que el marco del Tratado Vinculante dé prioridad a la no discriminación y a la igualdad sustantiva. Esto implica que se respete, escuche e incluya a las mujeres de diversos orígenes y comunidades. En lugar de situarlas retrospectivamente como víctimas pasivas de violaciones de los derechos humanos, deben estar en el centro del desarrollo de políticas y normativas para las empresas.

Además, las protecciones y los remedios deben ser específicos para abordar las desigualdades sistémicas y estructurales, agravadas a lo largo de los años. Las acciones de las empresas y la falta de una regulación exhaustiva y específica de estos impactos han causado y agravado dicha discriminación. El proceso de los tratados representa una oportunidad para que los Estados reafirmen la primacía de los derechos humanos y la salvaguarda de sus obligaciones en esta materia.

El enfoque de género es fundamental para reconocer y dar cuenta de estos impactos múltiples de las actividades empresariales sobre personas con identidades diversas. Nuestro análisis feminista apoya una visión de justicia socioeconómica para todes, a través de pasos concretos hacia la tan aplazada regulación de las actividades empresariales. Las medidas para la rendición de cuentas deben incluir los derechos humanos, así como la protección del medio ambiente.

Para que el Tratado Vinculante marque realmente la diferencia, debe tener en cuenta los retos específicos a los que se enfrentan las mujeres, las personas con diversidad de género y sus comunidades frente a los abusos de las empresas. Al hacerlo, también debe comprometer su liderazgo en la defensa de los derechos humanos y el medio ambiente y en la consecución de la transformación social. Ahora más que nunca, necesitamos un Tratado Vinculante feminista que exija responsabilidades a las empresas y, en consecuencia, anteponga las personas a los beneficios.

Feministas por un Tratado Vinculante - una coalición de más de 30 organizaciones de derechos humanos, que representan una amplia y diversa red de experiencias vividas por mujeres, análisis compartidos y conocimientos de todo el mundo en el proceso por un Tratado Vinculante. #Feminists4BindingTreaty.

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