Comunidades indígenas peruanas vienen denunciando que las actividades de las empresas petroleras PetroTal y Petroperú y sus resultantes constantes derrames de petróleo estarían afectando negativamente a su salud, sus derechos socio-económicos y el medio ambiente.

Desde el 28 de febrero, 17 comunidades indígenas kukama que viven dentro del Lote 95 (Loreto) paralizan las operaciones de PetroTal como forma de protesta por estas supuestas violaciones. También critican el uso de fuerzas policiales y militares por parte del Estado para hacer frente a la situación. Además, las comunidades exigen que tanto la empresa como el Estado apliquen los acuerdos alcanzados tras un conflicto en Bretaña en agosto de 2020, en el que murieron tres indígenas y once resultaron heridos por la policía.

El CIEDH invitó a PetroTal y a Petroperú a comentar las denuncias. Sólo Petroperú respondió.