…[S]e inició con una ceremonia maya y, posteriormente, los dos principales oradores expusieron sus ideas: Guillermo May Correa –Coordinador General de Asesores del Instituto Nacional para los Pueblos Indígenas (INPI)– presentó la dinámica del evento y Juan Javier Carrillo Sosa –Subdirector Técnico del Tren Maya por parte de Fonatur– tomó el micrófono para exponer un análisis cuantitativo de las reuniones regionales sobre el Tren Maya celebradas a finales de noviembre. 

[U]n comisario municipal me mostró el documento…[en el que] no se les recordaba informar a los miembros de sus pueblos sobre el tren o recoger sus dudas, sino más bien preparar "propuestas, opiniones, sugerencias o planteamientos sobre el proyecto" y pensar en "acuerdos respecto a su participación en la implementación [del mismo]"…[E]l Tren Maya se estaba presentando como un hecho consumado, y segundo,…tal iniciativa había sido promovida implícitamente entre las comunidades como el proyecto que permitiría, finalmente, traer consigo todas las soluciones a los problemas locales. 

…Del tren ya no se habló más…[A]l término de la exposición de las solicitudes de los pueblos mayas, el representante del INPI volvió a tomar la palabra y subrayó que, puesto que en ninguna de las 28 demandas expuestas había desacuerdos, se daba por sentada la aprobación del proyecto. Pidió entonces que se levantara la mano para confirmarlo y mientras todavía algunos lo hacían, afirmó que la asamblea aceptaba por unanimidad el Tren Maya…